Los mitos de la Guerra Civil ha sido quizá la obra de historia más vendida en los últimos años. También la más atacada y censurada, pero nunca rebatida. Por ello no ha envejecido, conserva íntegro su valor.
Al ciudadano corriente y no solo en España, le suenan con fuerza expresiones como «Guernica», «Alcázar de Toledo», «Batalla de Madrid», «Matanza de Badajoz», «Brigadas Internacionales», «Oro de Moscú», «Salvamento del Museo del Prado» y otras que se han convertido en símbolos. La Guerra Civil fue entendida en los dos bandos como un choque fundamental entre dos concepciones del mundo y de la vida, y de ahí su poderoso influjo generador de mitos, sorprendentemente vivo setenta y cinco años más tarde, y no solo en España.
Como cita Pío Moa del historiador británico Paul Johnson, nuestra guerra civil ha sido uno de los hechos del siglo xx sobre el que más se ha mentido. Este libro busca, precisamente, clarificar muchos de los mitos creados por propagandas apasionadas. Pues «sin conocer el pasado es inútil mirar al futuro» o, en palabras de Cicerón: «Si ignoras lo ocurrido antes de que nacieras, nunca dejarás de ser un niño».
«Franco contó con el apoyo de una gran parte de la población. La inmensa mayoría no quería volver al caos de terror, hambre y crímenes del Frente Popular, lo que el liberal Gregorio Marañón definió como mezcla de “estupidez y canallería”». Pío Moa, Le Figaro