Joe y Clarissa son una pareja feliz. Él se dedica a escribir sobre temas científicos; ella es profesora de literatura inglesa. Juntos se marchan a los verdes prados de las colinas de Chiltern, a un delicioso almuerzo campestre que aúna los placeres del vino francés, la naturaleza y el reencuentro amoroso. Pero en medio de ese civilizado paraíso, y casi sin que ellos se den cuenta, se introducirá una serpiente, inesperada e inocente, pero no por ello menos terrible.
Los tripulantes de un globo, un anciano y su nieto, se ven en serias dificultades. El aerostato, incontrolado, sube en el aire con el niño dentro, y Joe y otros hombres presentes en el lugar van a socorrerlo. En ese extraño nudo de encuentros urdido por el destino, el muy racional Joe conoce a Jed Parry, un fanático religioso que se obsesionará implacablemente con él... Ian McEwan, con su sutil ironía y su peculiar gusto por la comicidad más ominosa, urde una ambigua fábula moral, un thriller apasionante acerca de la naturaleza misma del amor, y su localización en la encrucijada entre la racionalidad y la locura.