El presente de Camboya es la embriagadora mezcla de una historia esperanzadora y depresiva a la vez. Aquí se puede ascender al reino de los dioses en Angkor Wat y bajar a los infiernos en la prisión de Tuol Sleng. Como nos explica uno de sus autores, Angkor es especial, la costa es bellísima y las rutas en motocicleta, espectaculares. Camboya sigue siendo una auténtica aventura que reluce gracias a la sonrisa contagiosa de su gente.
Incluye mapas de los templos de Angkor.