Creador de la película definitiva sobre la convivencia con fantasmas, y las también definitivas sobre superhéroes reales o invasiones extraterrestres en fuera de campo, M. Night Shyamalan es un creador de iconos y, sobre todo, de meditadas obras que generan enconados debates, polémicas sin fin entre la cinefilia. Este libro recoge las odiseas que ha tenido que emprender para levantar sus películas, las peculiaridades de sus producciones, el (lógico) secretismo, sus campañas de publicidad, sus encarnizadas (para bien y para mal) recepciones críticas y sus avatares para mantener el estrellato o salir del pozo de lodo más negro en el que ha estado nunca un director de género de primera línea.
Amparándose en el género fantástico, Shyamalan habla de temas terrenales, cercanos, a pie de casa e incluso existencialistas. No hay película suya que no aborde mucho más que el susto bien urdido (del cual también es dueño y señor). Aparatos perfectamente cerrados con una constante de giro final que ya se ha convertido en un acontecimiento para cada película, y que hacen del revisionado de sus obras una experiencia.
Al igual que Spielberg o Hitchcock, las máximas referencias con las que se le suele identificar, Shyamalan sabe bien que lo que prima son los personajes, y el género será más contexto que imperativo de su narrativa. Cineastas, críticos en la cresta de la ola, críticos cogiendo esa ola, directores de festivales, profesores de universidad, escritores, documentalistas, estudiosos, ilustradores, diseñadores gráficos, foreros, aficionados y por supuesto maravillosos e ilustres amateurs analizan aquí la trayectoria de un realizador cuya obra seguirá suscitando apasionantes controversias pasadas muchas décadas.